Arco del Triunfo

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Arco del Triunfo

El Arco del Triunfo es, como se intuye por el nombre, un imponente símbolo de la ciudad construido para homenajear al progreso económico, artístico y científico de la humanidad.  

Esta característica lo vuelve único en su especie, ya que habitualmente, los arcos del Triunfo, como aquellos situados en Roma o París, fueron construidos como un símbolo de triunfo por victorias militares. Se trata de una entre muchas metas imprescindibles y de paso durante tu tour por la ciudad. 

Arco del Triunfo en Barcelona
Arco del Triunfo en Barcelona  

La historia del Arco del Triunfo 

El Arco del Triunfo, conocido en catalán como Arc de Triomf, fue diseñado por el arquitecto Josep Vilaseca. Su construcción fue solicitada, junto al famoso  Passeig de Lluís Companys, para la exposición universal del 1888, y se convierte en el símbolo de la entrada a aquella exposición. El área que rodea al arco es un punto de paso muy amado por los Catalanes y los turistas, y es un lugar que acoge muchísimos eventos durante el año, incluidas las celebraciones de la Diada. Se trata de un área muy central, que está apenas a un km del Barrio Gótico y recorriendo la larga avenida del  Passeig de Lluís Companys, se llega al maravilloso Parc de la Ciutadella. El imponente arco es una estructura de una altura de 30 metros, construida siguiendo el estilo del arte Mudejar: un estilo único nacido en España bajo la dominación árabe. La decoración y las esculturas presentes en la parte superior del arco fueron elaboradas a mano por los artesanos más famosos de la época, entre los que están: Pere Carbonell, Josep Reynés y muchos más.  

El simbolismo de la decoración

Como se ha dicho anteriormente, este arco se distingue de los otros por ser el único en honor al progreso y no en honor a victorias militares. de hecho, esto se puede notar claramente por las esculturas presentes a los dos lados: en el lado derecho, encontramos los símbolos de la agricultura, de la industria y del comercio: mientras que en el lado izquierdo, encontramos los símbolos de recibir las naciones, mientras en la fachada frente al Passeig de Lluís Companys, notamos esculturas que representan el acto de dispensar las recompensas a las naciones. En la parte alta del arco, la que atrae más la atención de quien observa, son las doce figuras aladas que representan el triunfo y celebran tocando las trompetas y vistiendo coronas de laurel.  

Cómo llegar al Arco del Triunfo 

El Arco del Triunfo, se encuentra en el punto de encuentro entre el Passeig de Lluís Companys, la Ronda de Sant Pere y el Passeig de Sant Joan. Puedes llegar con un sencillo paseo por el Barrio Gótico, y si te encuentras más lejos, puedes coger la línea 1 de metro bajando en la parada con dicho nombre. Otra forma muy cómoda para visitar el monumento, como toda la ciudad, es utilizando el servicio del bus turístico. Elige el recorrido de la línea naranja y baja la parada del  Parc de la Ciutadella, recorre la maravillosa avenida del Passeig de Lluís Companys y llegado al final del recorrido, te encontrarás frente al imponente y maravilloso arco. 

Una mirada detallada al Arco de Triunfo de Barcelona

El arquitecto Josep Vilaseca concibió una obra de perfección clásica como símbolo del respeto de Barcelona hacia las naciones que participan en la Exposición Universal de 1888. Al mismo tiempo, el arquitecto eligió adornar los ladrillos expuestos del arco con decoraciones en estilo "neomoresco" (neo mudéjar en español) que era muy popular en España en ese período. La combinación del rojo de los ladrillos utilizados en la construcción y el blanco del friso se convirtió inmediatamente en un sorprendente contraste artístico, distinguido por la originalidad del primo parisino Arc de Triomphe de l'Étoile (terminado unas décadas antes, en 1836) o por el Arco de la Paz de Milán (que data del mismo período, completado en 1838). Una mirada detallada al magnífico portal de Barcelona lleva a comprender que el Arco del Triunfo fue la puerta de entrada a la modernidad de la ciudad de finales del siglo XIX. Por un lado, el friso frente al Paseo de Sant Joan se dirigió a las naciones que representan a Barcelona; Por otro lado, vemos cómo la ciudad reconoce a los participantes de la Exposición. De hecho, los relieves laterales simbolizan la agricultura y la industria en un lado del comercio y el arte en el otro lado. En la parte superior del arco también están los escudos de las 49 provincias españolas, tripuladas por el arma de Barcelona.


 
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